Los Bazucazos de Ubaldo Díaz
La inclusión en la lista de aspirantes del senador Ricardo Monreal, “no quiere decir que renuncie a lo que piense, que pierda mi autonomía en mi quehacer legislativo o que a partir de ahora sea el más fiel y obediente de las líneas del partido”.
El coordinador de los senadores de Morena aclaró que “yo no pierdo mi esencia, no pierdo mi posición de autonomía y siento que con el tiempo puedo convencer”.
Y aclaró: “Desde ahora lo digo eh! He dicho que no creo en esa encuesta que hace el partido”.
Aunque estatutariamente ya está definido, admitió, insistiremos en que logremos un mecanismo ecléctico, que lo mejoremos, que busquemos de qué manera la desconfianza no sea la que prive en el proceso interno, en su momento.
Monreal Ávila señaló que “no los voy a engañar. Si yo me comprometo a ir a un proceso interno, obviamente voy a respetar los resultados. Pero necesito aceptar los resultados, reiteró
Aunque reconoce y saluda el gesto de la carta a los gobernadores, el senador sostuvo que no va a caer en un exceso de confianza. Ni menos en un desbordamiento de optimismo.
Es un buen comienzo, reconoció, pero espera que se llegue también a un buen final “y que la altura de miras por el país sea lo que nos mantenga cohesionados”, indicó.
El senador dijo que tiene claro que la parte de haber corregido es por entender que la única vía para mantener al movimiento social en el gobierno próximo es la unidad.
“No nos debe de ganar ni la soberbia ni la arrogancia ni menos la ambición desmedida. Es una época en la que los valores y las causas se tergiversan fácilmente, entonces las reglas que se fijan son nuestras normas internas, que ahora las asumo, son nuestra ley, remarcó.
Asumo una posición ecuánime ahora, frente al cambio de actitud de la dirección y también del Gobierno. Pero ojalá y continúe, porque se requiere de mucha tolerancia para evitar la ruptura y para evitar cualquier otra situación de dificultad política para el futuro, señaló.
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Ante militantes y simpatizantes del tricolor de Piedras Negras y Sabinas, el precandidato del PRI a la gubernatura, Manolo Jiménez Salinas, se comprometió a integrar una propuesta innovadora que tenga como objetivo ampliar la cobertura de salud y la oferta educativa en el estado.
«En mis recorridos, una constante es escuchar que los ciudadanos quieren un mayor acceso a medicamentos, estudios y atención médica. Para llevar a Coahuila y nuestra gente al siguiente nivel, necesitamos atender las necesidades más básicas, pero de vital importancia, como lo es la salud”, dijo.
Informó que “en su momento, vamos a presentar nuevos proyectos integrales que nos permitan cuidar la salud de los coahuilenses”.
Durante sus actividades, también ha recogido propuestas en materia educativa, tomando siempre en cuenta las ideas y opiniones de la ciudadanía.
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El coordinador del PRD en el Congreso de la Ciudad de México, Víctor Hugo Lobo Román, en un punto de acuerdo presentado ante la Comisión Permanente, exhortó a que las 16 alcaldías destinen el 22% de su presupuesto para proyectos de infraestructura, equipamiento urbano y servicios públicos en todas las colonias, pueblos, barrios originarios y comunidades indígenas de su demarcación, propuesta que fue aprobada por unanimidad.
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Si alguien puede ser responsabilizado de la crisis política que se vive al interior de Morena es su presidente nacional, Mario Delgado.
La postulación de Ricardo Mejía como candidato del Partido del Trabajo para la gubernatura de Coahuila no solo rompió el acuerdo que tenía Morena con el partido de Alberto Anaya para ir en alianza a la boleta electoral, sino que parece haber modificado los amarres que se tejían entre el priismo local y el abanderado de la 4T, Armando Guadiana.
El actual gobernador Miguel Riquelme no veía con malos ojos la postulación y eventual triunfo de su excorreligionario Guadiana Tijerina; pero con el pleito que se desencadenó ya entre éste último y Mejía Berdeja, se decidió ya por cerrar filas y hacer el esfuerzo para que el representante de “Va por México”, Manolo Jiménez, se quede con el Ejecutivo local.
Morena se encuentra en riesgo de convertirse en un partido émulo del de la Revolución Democrática, donde la existencia de diversas tribus y la concentración de fuerza en una sola de ellas fueron los principales motivos de su casi extinción en la actualidad.
El PRD se fundó con la fusión de diversos partidos políticos y con el registro cedido por el PMS, pero se adhirieron a él migrantes del PRI, PFCRN, PPS, PARM y de grupos de izquierda que pertenecían a organismos pequeños.
Así navegaron sobre aguas tranquilas durante dos o tres lustros, aunque al inicio del nuevo siglo aparecieron los barruntos de tormenta, ya que las tribus creadas por lo diversos grupos existentes exigieron espacios más grandes.
Eso y la mala reputación de los principales cuadros perredistas fueron uno de los principales temas que llevaron a Andrés Manuel López Obrador a fundar su propio partido, el mismo que ahora se encuentra sacudido bajo señalamientos de varios de sus militantes hacia el dirigente nacional del partido.
No es Ricardo Mejía, el ahora candidato del PT al gobierno de Coahuila, el primero en acusar de corrupto a Mario Delgado, ya que con anterioridad otros personajes de Morena han hecho lo propio.
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