Aquí en el Congreso
Por José Antonio Chávez
Al final del día el senador Miguel Angel Osorio Chong no le quedó más que recular y buscar abrir un diálogo de reconciliación con el líder nacional del PRI, Alejandro Moreno “Alito”.
Sabe que el que más pierde es él, y sabe que seguir está línea de confrontación con el líder del partido, lo único que ganará será que se quede fuera del movimiento tricolor y sus aliados del PAN, PRD y hasta Movimiento Ciudadano de Dante Delgado.
Tal vez sus compañeros senadores de la minibancada lo convencieron que debería de buscar un diálogo de reconciliación, en base al mismo llamado que hizo Alito de luchar contra Morena y no contra el partido como ellos, los priistas, lo están haciendo.
Osorio Chong sufre la misma persecución del gobierno federal, le tienen un expediente de irregularidades cuando fungió como secretario de Gobernación en el sexenio de Peña Nieto.
Necesita urgente refrendar su fuero como legislador para enfrentar las acusaciones que mantiene en puerta el gobierno de López Obrador, pues mientras son peras o son manzanas, corre el riesgo de no poder defenderse en libertad.
Hoy Osorio Chong quiere un acercamiento con el líder del partido y dirimir las diferencias, es obvio que para su bancada y para el partido es lo mejor, toda vez que con la confrontación el senador la lleva de perder.
Los priistas están urgidos de llevar votos a su partido, está en puerta el Estado de México con Alejandra del Moral y Coahuila con Manolo Jiménez, ambos respaldados en la alianza con el PAN de Marko Cortés y el PRD de Jesús Zambrano.
Ganar esas dos entidades les darán oxígeno puro y, en automático los meterá a la pelea Presidencial del 2024.
Desde luego que la apuesta de Alito es lograr convencer el bloque de esos 45 millones de jóvenes que representan un porcentaje importante en la elección, son ellos los que van a decidir, sin duda el triunfo.
El escenario de perder esas dos entidades no les daría ni un miligramo de oxígeno para seguir viviendo ese partido priista, sería su extinción y eso repercutiría, no solo a Alito, sino a todos los priistas que han salido como gobernadores, alcaldes, senadores, diputados federales y locales, etcétera.
Es lógico que un fracaso se llevaría el tren a todos por igual, tanto a favor de Alito como en contra, al mismo Labastida Ochoa que está queriendo oxigenarse con otro proyecto y sin hacer lo mínimo por el tricolor.
Muchos se sirvieron del partido y ahora que está, desde 2018 en quiebra, algunos cuadros que fueron gobiernos simplemente se hacen a un lado en la búsqueda de otro proyecto que les de vida política.
Vamos a ver en que queda la petición de Osorio Chong porque su manifestación en la reunión plenaria cuando prefirió reventar para salir con Claudia Ruiz Massieu ante la llegada de Alito, lo hizo ver como si fuese el propietario de esa empresa denominada Senado Chong S.A.
MONREAL QUIERE CONVENCER CON SU PROYECTO
En julio se celebrará las encuestas para sortear que corcholata, de las cuatro de Palacio Nacional sale oficial para el 2024.
El líder del Senado, Ricardo Monreal quiere aprovechar este tiempo para convencer a la militancia de morena que le dé su apoyo para encabezar esa candidatura.
En consecuencia, Monreal hizo un llamado general a la población para que conozcan su proyecto de nación, le apuesta a la reconciliación y la unidad de todos los mexicanos.
Si bien lleva la base ese documento, con un contenido que, sin duda puede también enriquecerse con aportaciones ciudadanas.
Que él no es un político improvisado, sino que desde hace 42 años se encuentra en el servicio público, ya que ha sido gobernador de Zacatecas, alcalde de la Cuauhtémoc, legislador, tres ocasiones senador y también tres veces diputado federal.
EMPUJA PAN A IMELDA PARA SENADORA
Los panistas quieren convencer en Tamaulipas que su candidata, Imelda Sanmiguel es la más viable para hacer contrapeso en la Cámara Alta y digna sucesora del ahora gobernador, Americo Villarreal.
Es una elección fuera de serie por el lamentable fallecimiento del senador suplemente de Américo Villarreal. Al quedarse vacante ese escaño, obligó al INE a nuevas elecciones para designar un nuevo senador.
Esa candidatura lleva chanfle de apoyo de la alianza Va por México, es decir del PRI y del PAN que están con todo para ganar ese nuevo cargo.
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