Aquí en el Congreso
Por José Antonio Chávez
El jueves arrancará la segunda parte de confrontaciones del partido del Presidente Morena y los opositores del PRI, PAN, PRD y MC.
Se instalará el cuarto año de esta legislatura y en San Lázaro se estrenará el mandamás de la bancada de Morena, Ignacio Mier como presidente de la Junta de Coordinación Política, mientras que en la Mesa Directiva asumirá el PAN con Santiago Creel.
Mientras que en el Senado, su líder Ricardo Monreal adelantó que se decidirá este miércoles la nueva Mesa Directiva de la Cámara Alta, están en la primera línea Alejandro Armenta y José Narro, pero puede haber sorpresas con Higinio Martínez y Horacio Duarte.
Que tiene que ver estos cargos en San Lázaro, bueno, primero porque la llegada de Mier a la JUCOPO le permitirá, de entrada, impulsar la construcción de la Sección Instructora para llevar al proceso de desafuero del líder del PRI, Alejandro Moreno “Alito”.
Es una Sección Instructora que no se podía constituir porque estaba el propio PRI en la presidencia de la JUCOPO, con Rubén Moreira.
Sin embargo, esa Sección Instructora, que es el órgano facultado para ese proceso, se integrará de cuatro diputados de los cuales uno le toca designar a las cuatro bancadas con mayor número de legisladores, Morena con 200, PAN con 114, PRI 70 y Verde con 40.
En consecuencia, Morena y su aliado del Verde lograran dos votos mientras que el PAN y PRI otros dos, una votación empatada que sin duda se terminará enviando a la congeladora o desechar esa propuesta de procedencia.
A pesar que a Morena le corresponda la presidencia de esa Sección Instructora, no le valdrá de nada porque sabe que no lo dejarán pasar para dictaminar y enviar ese asunto al Pleno donde ganarían con su mayoría simple de votos sin el menor esfuerzo.
En el PAN de Marko Cortés, ofrecieron ayer el total respaldo al diputado y líder nacional del PRI, porque están plenamente seguros que lo que quiere el Presidente López Obrador es reventar la alianza de los opositores.
Jesús Zambrano del PRD expresó, incluso que más que dividir la alianza se fortalece y en la Cámara de Diputados con su coordinador, Luis Cházaro refrendaron su rechazo a las reformas de la Guardia nacional y la Electoral, que simplemente no pasarán.
Alito junto con el propio Dante Delgado, Cortés y Zambrano reforzaron que no cederán a esas reformas presidenciales como quiere que se aprueben del que manda en Palacio Nacional, que ellos aportarán sus propias propuestas y entonces si que chequen si están de acuerdo.
El líder priista está convencido que la campaña de golpeteo en su contra es una auténtica venganza del Presidente porque no le aprobaron con sus 70 votos priistas la reforma Eléctrica.
Y refrendó que será la misma película con la Guardia Nacional, no pasará porque es tanto como legitimar que se militarice el país.
Anote que el pleito se agravará conforme se acerque las elecciones del Estado de México, pues es una entidad que representa el mayor porcentaje electoral y, podríamos decir la joya de la corona que hoy la gobierna el PRI con Alfredo del Mazo.
INTERNET DE CFE Y LA CFE DEL CENTRO
En Nuevo León, el Presidente se reunió con trabajadores de la CFE para echar a volar el proyecto de internet para todo el país y con beneficio directo a 6,5 millones de usuarios de los lugares más apartados, allá donde las empresas no voltean a ver porque no es negocio.
El Presidente resaltó que si no se apoyan en los trabajadores de PEMEX y si no rescatan la paraestatal y lo mismo si no se apoyan con los electricistas, simplemente no pueden rescatar la CFE.
Por ello, llama la atención el rescate que lleva el Presidente de la extinta CFE del Centro en la Ciudad de México que provocó el sexenio de Felipe Calderón, le cayó como una bocanada de oxígeno a su líder Martín Esparza.
De acuerdo con el gobierno de López Obrador, esa extinta CFE capitalina concentraba más de 40 mil empelados que fueron dados de baja y con una liquidación menor a la que les correspondía.
El grueso de esos trabajadores, optaron por seguir en la lucha y rechazaron el pago de su liquidación.
Esparza buscó consensar al interior de su sindicato que se agruparan y evitar que se desintegrara ese movimiento. Hoy la CFE del Centro se puede considerar que serán reintegrados como empresa que le de servicio a esta administración. Obviamente la apuesta es la experiencia de sus trabajadores que estaban en total desperdicio.